El tercer nivel de CIMM se centra en la creación de procesos estables y confiables con un resultado predecible. El objetivo principal de la creación de procesos predecibles es prevenir situaciones de inseguridad, estrés, resolver sobre la marcha, largos plazos de entrega y mala calidad.
En otras palabras, crear un entorno en el que las personas sepan lo que va a suceder y en el que se puedan hacer propuestas claras al cliente. Recuerde que una fecha de entrega confiable generalmente es mejor que un lapso de entrega corto pero poco confiable.
Lean se enfoca principalmente en optimizar la logística dentro de un ambiente de trabajo. Sin embargo, al crear procesos estables y confiables, donde las personas se centran sólo en añadir valor y eliminar desperdicios, la calidad suele aumentar automáticamente. En entornos muy dependientes de máquinas, se utiliza a menudo el “Mantenimiento Productivo Total” (MPT). Además, la “Teoría de Restricciones” (TDR) o la teoría de los cuellos de botella de Goldratt es un método potente para mejorar los procesos.